
Pese a los cuatro años de austeridad, que han provocado numerosas protestas por parte de la población, no ha nacido en Portugal ninguna alternativa capaz de plantar cara a los partidos ya establecidos. En el país vecino no existe, al contrario que en Grecia o en España, ningún símil de Podemos o Ciudadanos y será entre el Partido Socialdemócrata (PSD) y el Partido Socialista (PS) entre los que elijan, mayoritariamente, los 10 millones de portugueses que están llamados a las urnas este domingo.
En la imagen, Pedro Passos Coelho, del PSD, durante un acto electoral.